A
Alessandro Maradei
Guest
Una inmersión en el Hipódromo de Maroñas revela los anhelos más variopintos, personas de distintas clases sociales se mezclan en un ritual que tiene que ver con el dinero, sí, pero no solo eso. La cabeza que puede cambiarlo todo, la adrenalina de ganar, y de perder.
Las gateras de 16 animales listos. Dos mil cuatrocientos metros de pista de arena marcados por pronósticos, resultados, tensión, adrenalina, el calor, la esperanza del boleto ganador, el amor a los caballos.
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Con el condimento de una bolsa de miles de pesos, ganar y perder es parte del juego. Apostar en las carreras es casi un juego de azar. Algunos van por su caballo favorito, p...
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