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Mauricio Diaz
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El expresidente Luis Arce expresó un rechazo frontal a las medidas económicas impulsadas por el gobierno de Rodrigo Paz, en una carta manuscrita difundida este 18 de diciembre, en la que califica la eliminación de la subvención a los hidrocarburos como un “crimen contra el pueblo” y advierte un fuerte impacto sobre las familias más humildes del país.
Desde su reclusión en el penal de San Pedro, el exmandatario sostuvo que la decisión del Órgano Ejecutivo ocasiona una “brutal subida de precios” tanto en el área urbana como rural y castiga de manera directa a los trabajadores asalariados y no asalariados. “Es un crimen contra el pueblo trabajador (…) que desde ahora enfrenta una brutal subida de precios”, señala la misiva.
Arce cuestionó que el Gobierno haya optado por una eliminación inmediata de la subvención a los combustibles y afirmó que la medida “pudo haberse hecho de diferente manera”, con menor impacto social y mediante mecanismos de consulta democrática.
En ese sentido, planteó que una decisión de tal magnitud debió ser sometida a un referéndum o, al menos, a un amplio debate parlamentario y social.
En su análisis económico, el expresidente alertó que el incremento del precio de la gasolina alcanza el 86% y el del diésel supera el 163%, lo que —según advierte— repercutirá en toda la cadena productiva, elevando los costos de producción de alimentos y otros bienes, con un efecto directo en la inflación.
“Esto repercutirá directamente en los precios al consumidor, derivando en una elevación drástica de la tasa de inflación”, escribió.
Asimismo, Arce cuestionó las medidas compensatorias anunciadas por el Gobierno, al considerar que son insuficientes frente al alza de los combustibles. Señaló que el aumento del salario mínimo nacional del 20% solo beneficia a trabajadores formales y no alcanza a la mayoría de la población, además de no compensar el encarecimiento general del costo de vida.
El exmandatario también sostuvo que el levantamiento de la subvención no resuelve los problemas estructurales del país, como el desabastecimiento de combustibles ni la falta de dólares, y afirmó que incluso con créditos ya aprobados por la Asamblea Legislativa “no se ha solucionado el abastecimiento de diésel en el país”.
En otro tramo de la carta, Arce vinculó las medidas económicas con su situación judicial y denunció una supuesta persecución política. Afirmó que su detención preventiva fue ratificada sin permitirle ejercer una defensa plena y aseguró que se busca convertirlo en un “chivo expiatorio” para desviar la atención de las medidas “antipopulares” del actual Gobierno.
“Quieren callarnos, la cárcel no es un callar”, escribió Arce, al reafirmar que continuará denunciando lo que considera un retroceso económico, social y político.
El expresidente cerró su pronunciamiento señalando que, a su juicio, las decisiones del Ejecutivo responden a un “modelo de exclusión” y advirtió que “más temprano que tarde, el pueblo se dará cuenta” de los efectos de estas políticas.
Arce firmó la misiva y al final se consideró “preso político de Rodrigo Paz”.
The post Arce rechaza las medidas de Paz y denuncia un ‘castigo al pueblo’ appeared first on La Razón.
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Desde su reclusión en el penal de San Pedro, el exmandatario sostuvo que la decisión del Órgano Ejecutivo ocasiona una “brutal subida de precios” tanto en el área urbana como rural y castiga de manera directa a los trabajadores asalariados y no asalariados. “Es un crimen contra el pueblo trabajador (…) que desde ahora enfrenta una brutal subida de precios”, señala la misiva.
Luis Arce
Arce cuestionó que el Gobierno haya optado por una eliminación inmediata de la subvención a los combustibles y afirmó que la medida “pudo haberse hecho de diferente manera”, con menor impacto social y mediante mecanismos de consulta democrática.
En ese sentido, planteó que una decisión de tal magnitud debió ser sometida a un referéndum o, al menos, a un amplio debate parlamentario y social.
En su análisis económico, el expresidente alertó que el incremento del precio de la gasolina alcanza el 86% y el del diésel supera el 163%, lo que —según advierte— repercutirá en toda la cadena productiva, elevando los costos de producción de alimentos y otros bienes, con un efecto directo en la inflación.
Medidas Económicas
“Esto repercutirá directamente en los precios al consumidor, derivando en una elevación drástica de la tasa de inflación”, escribió.
Asimismo, Arce cuestionó las medidas compensatorias anunciadas por el Gobierno, al considerar que son insuficientes frente al alza de los combustibles. Señaló que el aumento del salario mínimo nacional del 20% solo beneficia a trabajadores formales y no alcanza a la mayoría de la población, además de no compensar el encarecimiento general del costo de vida.
El exmandatario también sostuvo que el levantamiento de la subvención no resuelve los problemas estructurales del país, como el desabastecimiento de combustibles ni la falta de dólares, y afirmó que incluso con créditos ya aprobados por la Asamblea Legislativa “no se ha solucionado el abastecimiento de diésel en el país”.
Carta
En otro tramo de la carta, Arce vinculó las medidas económicas con su situación judicial y denunció una supuesta persecución política. Afirmó que su detención preventiva fue ratificada sin permitirle ejercer una defensa plena y aseguró que se busca convertirlo en un “chivo expiatorio” para desviar la atención de las medidas “antipopulares” del actual Gobierno.
“Quieren callarnos, la cárcel no es un callar”, escribió Arce, al reafirmar que continuará denunciando lo que considera un retroceso económico, social y político.
El expresidente cerró su pronunciamiento señalando que, a su juicio, las decisiones del Ejecutivo responden a un “modelo de exclusión” y advirtió que “más temprano que tarde, el pueblo se dará cuenta” de los efectos de estas políticas.
Arce firmó la misiva y al final se consideró “preso político de Rodrigo Paz”.
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