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Mathew Chaves
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Tras realizar el examen de admisión y obtener la correspondiente nota, un total de 38.948 personas que resultaron elegibles para optar por una carrera en la Universidad de Costa Rica (UCR) intentará ocupar uno de los 10.493 nuevos cupos disponibles para el próximo curso lectivo 2026.
Los 10.493 espacios disponibles incluyen tanto la admisión ordinaria como la diferida, evidenciando que la demanda supera casi cuatro veces la oferta disponible en el caso de la UCR, aunque varios de estos elegibles también optaron por concursar en la Universidad Nacional y el Instituto Tecnológico.
Del total de espacios habilitados, la gran mayoría corresponde al concurso de Admisión Ordinaria, que dispone de 9.629 cupos distribuidos en todas las sedes. Para intentar cerrar las brechas de acceso, la universidad reserva 863 espacios exclusivos para la Admisión Diferida, un mecanismo diseñado para estudiantes de centros educativos que tienen menor probabilidad de ingreso.
La procedencia educativa de los postulantes muestra un dominio de la educación pública en la búsqueda de mejores oportunidades educativas. Según el cuadro de inscritos, 31.348 estudiantes provenientes de colegios públicos realizaron la prueba, lo que representa el 80% del total de participantes.
En contraste, la participación de colegios privados fue de 4.871 personas, una cifra seis veces menor a la de los colegios públicos. También se contabilizaron 1.846 estudiantes de colegios subvencionados y 936 de educación abierta, lo que refuerza la presión que recae sobre la UCR para atender a la población que depende del financiamiento estatal para su formación profesional.
El director de la Oficina de Registro e Información, Marco Monge, explicó a UNIVERSIDAD que la definición de estos cupos responde a una negociación compleja con las unidades académicas. “La política es siempre mantener al menos los cupos del año anterior o aumentarlos”, señaló, aclarando que factores como la capacidad física de laboratorios y plazas docentes son determinantes.
El vicerrector de Docencia, Jairol Núñez, comentó que el aumento de aproximadamente 160 cupos para 2026 obedece a factores como la ampliación de carreras STEM en la Sede de Occidente y la apertura de la carrera de Economía Agrícola y Agronegocios en el Recinto de Santa Cruz.
También se estrenarán el próximo año las carreras de Bachillerato y Licenciatura en Educación de las Ciencias del Movimiento Humano para la Salud y la Calidad de Vida (Sede de Occidente), Enseñanza Bilingüe de la Matemática (Sede de Occidente, Sede del Atlántico, Escuela de Formación Docente) y Licenciatura en Gestión y Logística Empresarial (Sede del Sur).
“Es igualmente necesario recordar que cada Unidad Académica define su capacidad máxima de ingreso según criterios académicos, disponibilidad docente, secuencialidad curricular y características del plan de estudios. Además, la Universidad cuenta con tres periodos de matrícula —ordinaria, inclusión y de aprovechamiento— que buscan optimizar la utilización de cupos”, apuntó el vicerrector.
Desigualdad geográfica y logística
La distribución geográfica de la demanda y la oferta revela disparidades significativas. La Sede Rodrigo Facio acapara el 62,2% de la capacidad total con 6.530 cupos, dejando 3.962 espacios para repartir entre todas las sedes regionales y recintos del país.
Esto genera escenarios críticos en zonas rurales. Por ejemplo, el Recinto de Santa Cruz en Guanacaste dispone únicamente de 35 cupos totales (30 ordinarios y 5 diferidos), mientras que el Recinto de Siquirres en el Caribe ofrece apenas 75 espacios. Estas cifras contrastan con la Sede de Occidente en San Ramón, que cuenta con una oferta “más robusta” de 654 cupos nuevos.
Al analizar la procedencia de los 39.177 aspirantes que realizaron la prueba, la centralización es evidente. La provincia de San José aportó 11.323 postulantes, seguida por Alajuela con 7.607 y Cartago con 5.040. Las provincias costeras muestran números más bajos: Guanacaste registró 3.612 participantes y Puntarenas 3.585.
El desglose por cantones permite observar focos de altísima demanda en la Gran Área Metropolitana. El cantón central de San José lidera con 1.873 aspirantes, seguido por Alajuela con 1.791 y Desamparados (San José) con 1.435. En la Zona Norte, San Carlos se posiciona como un gigante con 1.361 personas buscando ingreso. En el otro extremo, existen cantones con una participación mínima. Monteverde registró solo 47 participantes, Turrubares 58 y San Mateo 56.
Para este proceso 2025-2026, la logística de admisión incluyó cambios importantes para garantizar la seguridad de la prueba. El examen se aplicó en un único fin de semana masivo, el 11 y 12 de octubre, con el objetivo de reducir el tiempo que los ítems pasan “en la calle” y minimizar riesgos de plagio.
Monge destacó que esta optimización de tiempos busca entregar resultados antes de finalizar el año, específicamente el próximo 17 de diciembre. “El objetivo de la Oficina siempre fue llegar a diciembre con los resultados publicados (…) para tener un poco más de tranquilidad, de paz mental en estas épocas navideñas”, comentó el director.
Además del bienestar estudiantil, adelantar la publicación de resultados tiene un fin estratégico: aumentar la tasa de consolidación de matrícula, que actualmente ronda el 70%, según el director de Registro. Al competir con los tiempos de otras universidades, la UCR busca asegurar que los estudiantes admitidos efectivamente ocupen su lugar y no migren a otras opciones por incertidumbre.
Uno de los problemas recurrentes que la administración busca mitigar es la elección estratégica fallida de sedes. El sistema permite elegir dos recintos para una misma carrera, y muchos estudiantes seleccionan una sede regional como segunda opción sin intención real de trasladarse, quitándole el cupo a un local.
“Resulta que se les da un cupo en Turrialba o en Guanacaste y al final dicen ‘ay no, muy lejos’. Pero no se dan cuenta que esa acción le está ocasionando a la sede perder ese cupo”, advirtió Monge. El funcionario hizo un llamado a no llenar esa segunda opción si no existe la voluntad de traslado.
El proceso de admisión no termina con la lista ordinaria. Aquellos que no logren cupo el 17 de diciembre tendrán una segunda oportunidad mediante la Admisión Diferida. Este mecanismo asignará los 863 cupos restantes a estudiantes de colegios con baja representación, cuyos resultados se publicarán el 7 de enero de 2026.
Es importante destacar que de los 48.897 inscritos inicialmente, 9.720 personas no se presentaron a realizar la prueba, lo que representa una abstención cercana al 20%. Además, 229 estudiantes que hicieron el examen quedaron excluidos por no presentar su promedio de notas de educación diversificada.
Los estudiantes admitidos en la fase ordinaria deberán consultar sus resultados en la página oficial de la ORI (ori.ucr.ac.cr). Para aquellos que deban participar en la fase diferida, el proceso es automático y no requiere trámites adicionales, ya que el sistema selecciona a los beneficiarios basándose en los criterios de equidad establecidos.
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